sábado, 9 de mayo de 2009

Y que no te cuenten que el mundo se acaba en el 2012, todavía viene lo mero mero bueno -- ¿O no, Señor Spock?

2 comentarios:

  1. -----

    Ya en reversa completa...

    Para comenzar a revisar todo esto. Que fue hecho, todo, para ello, para ser revisado y reescrito en la zona de Comentarios. Donde ya estamos, afortunademanete.

    Hay un cuento de por medio en esta blog. El del canario como un ente secuestrado por los piratas del Pacífico, sin Johny Depp --porque cobra un lanal de feria por sobreactuarse y depender tanto de un maquillaje más caro. Más otras historias divertidas, como la de M como virólogo aficionado o amateur...

    Con eso de, cuando su tícher de Demografía, el doctor Jaime Guerrero, allá en 1972, en la ESE del Poli, les dijo a Los Barbajanes de su grupo:

    --No, señores. Les falta información. El capital se regula por medio de la población real del planeta. La plusvalía y Marta Jarnéker, para nuestra materia de estudio, son lo mismo que Ray Bradbury y Alejo Carpentier, literatura, escritura hecha a ciegas por los sirvientes voluntarios del canon de escritura burgués. Simples canarios en la mina de carbón, señores y señoras... Lo que vamos a estudiar recupera a Malthus por completo y revisa la vida privada de Karl Marx y Friedrich Engels. Hipótesis: el primero mencionado embarazó a una empleada domèstica y fue tan cobarde de obligar al segundo a reconocer la criatura como suya. Eso no es demografía, es pendejez y nobleza. Aquí queremos datos duros, ustedes, como economistas, van a bucar trabajo para resolver los problemas del mundo, no para que les den un Premio Nobel...

    Y cuando para dirigira la Gaceta de la UNAM un ratito, allá en 1983, en pleno Tiempo de Cumbia, vio el tamaño de los problemas por infección viral, de acuerdo al gran conflicto que significa tovaía el sida. Más el rato en que con un grupo de científicos de la Facultad de Ciencias de la misma UNAM. estudió con detalle lo del virus del sida y las pandemias y las cosas que ello implica como guerra bacteriológica.

    Un buen de cosas. Ya en suma.

    Que dejan loco al más cuerdo.

    Y que ya produjeron toda esta blog.

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  2. -----

    (I)

    Como chamaco descuidado que fue robado por los piratas, el canario fue a dar a Estambul, antes Constantinopla. Se habla de una foto como la de Lautreamont, donde al canarito en cuestión se le ve, todavía, con traje de marinerito y su paletón francés de Larín. Su abogado por lo de los derechos de autor sobre el sueño que se le indujo con masaje de cosquillas en la planta de los pies, dice que no hubo tal.

    (II)

    En Estambul, lo compra un tortero turco que vende pescado frito y pan relleno de lo que le digan y manden, si tiene. Porque el aguacate por allá sólo llega cuando Belzebú menea el rabo. Con un pápalo, que ofrece el tortero turco de Estambul a raudales en su puesto junto al Bósforo, para disminuir el peso de las grasas en el estómago, y para hacer que los gases estomacales, si se dan y salen en público, huelan a menta inglesa. Porque el tepache por allá no se hace con piña fresca de Hawai, puro polvo de frasco con etiqueta amarilla a la Van-Gogh, que incentiva los gases con color azufroso y olor a diablo ya con ganas, prendido. Luego hasta les da color rojecito, a esos gases incómodos que no soporta el píloro, algo que, al publicarse por el silbidito de como olla exprés, resulta aún más bochornoso. Hasta para quien ve desde lejos como narrador de Robbe-Grillet. ¡Qué tiempos meta-literaios aquellos, señor don Raùl! Ya que en Facbook invocó al "toy" Javier Córdoba, que saque, que saque... Otro cuadrito de esos de exilio en Babilonia, tan de él.

    (III)

    Tortas turcas de Estambul que vuelven famosa a la empresa en todo el Mediterráneo. Hata que un día Carla Bruni, antes de ser la torta oficial de Sarkozy, va y se retrata con un tortón de esos y el canarito haciendo como que saca papelitos de su suerte, estilo Basílica de Guadalupe. Allí lo reconoce su madrecita santa. Que con el Hola! en la mano va y lo reclama desde la embajada mexicana en Estambul, antes Constantinopla o Bizantio o Bizancio, que es como lo de Káiser o César, algo muy delicado que nadie que no entienda latín puede agarrar como es, por los cuernos.

    (IV)

    Viena a México. Como aquel chamaco cubano que anduvo por Miami. La huelga del líder charro en Cananea lo saca de la mina y la jaula, deviene agente libre, luego, desempleado...

    (V)

    Llega a este sitio y anida.

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    Es el cuento que faltaba.

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