Igual que todo comienza de repente. Por el susto. Así termina. Por el susto.

Seguir es dar informes del clima. Ver qué pasa con el esmog, primero que nada. Lo de la influenza por el nuevo virus va para largo, y pide no apresurar ya nada. Dejar que todo sea como debe ser. Lento, mientras más lento, mejor.

Fue un sustazo para quien se imagina lo que puede ser una Megademia por influenza acelerada. Más lo que aportó el encarar lo inepserado y nuevo como es... riesgo, peligro, incertidumbre.

Queda la huella. Unos muchos síntomas, las entradas de esta blog. Un relato anómalo. Puede servir para entender la subjetividad, el pensar que piensa por escrito, escribiendo. Cuando no se puede hacer otra cosa, para calmar la propia angustia. Algo que intensifica nuestra situación de Chorcha Chillys Willys desde hace ya más de cuatro años, que flotamos, casi por casualidad, en el mar revuelto de la realidad. Razón principal porque no hemos subido imágenes visuales o auditivas nuestras. La pobreza obligada nos ha frenado; pero no creemos que falte nada.

Está dicho lo que teníamos que decir. Es tiempo de revisar y tratar de hacer autoconciencia.

Derivaremos ahora por las otras blogs que hemos abierto.